Sebastià Miranda Torrent

La memoria de los otros y la mía deberán enlazar en algún momento o en algún punto. Todos tenemos derecho a recordar; no tenemos otra manera de vivir. Me moriré definitivamente cuando ya no pueda recordar.

Maria Aurèlia Capmany i Farners

En este libro he querido explicar mi trayectoria vital: la de un niño feliz observando como el ganado comía en el comedero durante el atardecer de vuelta al corral (el comedero es el lugar donde comen las ovejas) hasta un adulto que intenta disfrutar, de forma bastante torpe, de las ventajas de las nuevas tecnologías. Es decir, del comedero al hashtag.

Tengo esclerosis múltiple, una enfermedad neurodegenerativa. Tengo que responder a este reto que me plantea ahora la vida; no me tengo que acomodar, tampoco acobardar. Tengo que escribir un libro, ahora que aún puedo hacerlo. Quiero explicar mi historia personal. Quiero dejar a Glòria, a mis hijos y mis nietos… el testimonio escrito de mi vida: el regalo que les ofrezco por el amor que he recibido de ellos.

Sebastià Miranda

Conocer a Sebastià Miranda, ha sido uno de esos regalos de la vida que nunca acabaremos de agradecer. Damos fe de que ha encarado muchas adversidades con valentía, coraje y dignidad. Su alegria y su amistad nos acompañan y su ejemplo de persona nos recuerda que, por mucho que suframos dificultades y vicisitudes, la vida es maravillosa:
A través de la metáfora de la siega y la recolección, veo la vida como un trayecto lleno de una gran cantidad de experiencias, heterogéneas en la temática y de intensidad variable, que son vividas in situ. Sin embargo, después permanecen en el recuerdo que, ahora y antes, va configurando la identidad personal. Tal y como dice acertadamente el cantautor «quien pierde los orígenes pierde la identidad». Y este recuerdo constituye, también, una parte esencial de la experiencia vital y de la permanencia de la identidad, que yo quiero preservar.

Debido al COVID, no pudimos presentar el libro de Sebastià.
¡Lo haremos próximamente!